Con más de 33.130 empleados a tiempo completo, el sector vitivinícola es responsable del 3,1% del PIB de Castilla y León, y genera un Valor Añadido Bruto superior a los 1.817 millones de euros anuales. Contribuye a generar el 3,8% del empleo en Castilla y León.
Son datos del estudio sobre La Importancia Económica del Sector Vitivinícola en Castilla y León, que refleja algunos datos de relevancia, que “descubren la trascendencia económica del sector vitivinícola dentro de la economía de Castilla y León”.
La comunidad cuenta con nueve denominaciones de origen
Castilla y León es la segunda comunidad autónoma con mayor superficie de viñedo en España con más de 80.237 hectáreas repartidas por toda la región, lo que se traduce en un 8,5% de la superficie nacional. Esas cifras significan que el sector está presente en 599 municipios de la comunidad, “lo que significa que la actividad vitivinícola es motor de la economía y el empleo de esos pequeños municipios, resultando clave para su supervivencia y desarrollo”, según la Junta.
La comunidad cuenta con nueve denominaciones de origen y con otras cuatro zonas que elaboran bajo la mención de Vino de Calidad: las de Valtiendas, Valles de Benavente, Cebreros y Sierras de Salamanca. Además, cuenta con la mención Vino de la Tierra de Castilla y León, con categoría de IGP.