Esta vía de comunicación hunde sus raíces en los tiempos anteriores a Roma, cuando las mercancías ya atravesaban el oeste peninsular de sur a norte. Los romanos construyeron una calzada entre las actuales Mérida y Astorga, la ‘Iter ab Emerita Asturicam’
Ricardo Ortega
Pocas comunidades españolas tienen el privilegio de contar con dos rutas de peregrinación y profundo valor cultural de la importancia del Camino de Santiago francés y la Vía de la Plata.
La primera de ellas posee una proyección universal gracias al fenómeno jacobeo y a estar declarada Patrimonio de la Humanidad; la segunda ofrece un poso histórico y cultural equivalente, y en los últimos años ha conocido un notable renacimiento gracias a su puesta en valor como ruta de peregrinación hacia Santiago.
La Vía de la Plata hunde sus raíces en los tiempos anteriores a Roma, cuando las mercancías ya atravesaban el oeste peninsular de sur a norte. Los romanos construyeron una calzada entre las actuales Mérida y Astorga (‘Iter ab Emerita Asturicam’), si bien en las últimas décadas se ha aprovechado su fama para denominar a la ‘ruta de la plata’, que enlaza Sevilla con Gijón.
Quienes toman el recorrido original como ruta cultural o de ocio tienen mucho para recrearse; desde numerosos restos romanos hasta diferentes ciudades declaradas Patrimonio de la Humanidad (las de Mérida, Cáceres y Salamanca), además de localidades de innegable valor, como Zamora o la propia Astorga.
La Vía de la Plata es ante todo la ruta de los miliarios, puesto que se han documentado 189 de estas piedras cilíndricas que se situaban junto a la calzada para señalar cada milla romana (aproximadamente un kilómetro y medio). Estos hitos permitieron confirmar el recorrido de la vía histórica en los tramos donde se hallaron, y sugerir aquellos intermedios que no los han conservado.
El campo charro se abre camino a los peregrinos (foto inferior) mientras otros caminantes deciden visitar algunos monumentos de marcado interés histórico, como el Monasterio de Santa María de Moreruela, en Zamora (foto derecha).
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