La Denominación de Origen Cigales finalizó su vendimia el 9 de octubre de 2017 con una producción total de 5.749.295 kilos de uva, lo que supone una disminución de un 33% con respecto a la cosecha del año anterior. Las heladas primaverales, la sequía y el calor excesivo de este año han causado la merma de producción de una campaña complicada desde el punto de vista meteorológico
La situación creada por los fenómenos meteorológicos propició el adelanto de la vendimia al 6 de septiembre, en el municipio de Cigales y concluyó el 9 de octubre en la localidad palentina de Dueñas. Un mes de recogida de uva que registró su mayor actividad del 14 al 28 de septiembre.
Tal y como determinan los servicios técnicos del consejo regulador de la DO, la sanidad de la uva ha sido muy buena. La consecuencia positiva de la falta de lluvia y altas temperaturas de la primavera y verano ha sido la ausencia de cualquier tipo de enfermedad en el viñedo.
Debido a la poca carga de las viñas, todo lo que la planta sintetizó ha alimentado a los escasos racimos y, como resultado, se ha obtenido una alta concentración de componentes en el fruto. Todo ello hace augurar una excelente calidad que podría compensar, en parte, la merma en la producción.
La variedad principal de la Denominación de Origen Cigales, la tempranillo, ha supuesto el 87% de la producción, la garnacha ha registrado un 5,6 %, y la verdejo, un 4,4 %. El el 3% restante se distribuye entre el resto de variedades acogidas: cabernent sauvignon, merlot, sauvignon blanc, albillo, viura, syrah y garnacha gris.