La localidad es un claro ejemplo de la aportación asociativa para poner en valor la riqueza cultural, natural y patrimonial
La socialización del patrimonio es una de las principales funciones que tienen las entidades que velan por que el patrimonio cultural de los municipios no caiga en el olvido.
De todos es conocido el serio problema que tenemos en la comunidad autónoma con la despoblación, en línea directa con el ingente patrimonio existente en un tierra que tanto ha aportado a la historia de nuestro país y que, en la mayoría de los casos, padece numerosos problemas en cuanto a conservación y gestión.
En la ciudad de Arévalo, el segundo municipio de la provincia de Ávila y municipio integrado en la Red de Conjuntos Históricos de Castilla y León, se encuentra trabajando desde el año 2008 la Alhóndiga de Arévalo, Asociación de Cultura y Patrimonio para poner en valor el diverso patrimonio material e inmaterial que dispone esta bella ciudad que la atraviesa la antigua Nacional VI.
La Asociación llegó a tener setenta socios con una vida asociativa muy activa, con actividades quincenales con buena respuesta del vecindario. Desgraciadamente, la pandemia ha hecho estragos en muchos colectivos sociales y La Alhóndiga no ha sido una excepción. Se ha reducido a la mitad aproximadamente y poco a poco está saliendo adelante gracias al esfuerzo y trabajo por mantener el legado cultural y asociativo.
Desde junio de 2009 hasta la actualidad, la asociación ha editado una revista mensual de cultura y patrimonio donde se escribe sobre diversos temas de interés, así como de crítica constructiva acerca de la situación del extenso patrimonio del municipio.
El nombre ya es un reflejo del sentir de este colectivo al recuperar la denominación del semanario que en 1926 reapareció durante la época mas gloriosa de la prensa escrita en Arévalo.
En mayo de 2024 se edita el ejemplar número 180 y, sin duda, se trata de uno de los referentes de las publicaciones realizadas por asociaciones en Castilla y León siendo, seguramente, la más antigua en vigor.
Todas estas publicaciones digitalizadas se pueden leer en www.lallanura.es, haciendo un fiel reflejo de lo acontecido en Arévalo durante los últimos veinticinco años.
Aparte de esta revista, la web es punto de encuentro en el que también se tiene acceso a diversos documentos de interés para conocer en profundidad parte del legado patrimonial e histórico que dispone la ciudad.
Desde la pandemia, los socios demandan más actividades medioambientales para conocer el patrimonio natural que dispone el término municipal. En esta línea, se está trabajando en varios frentes como es la realización de actividades medioambientales por los ríos o excursiones a parajes singulares del territorio situado en el norte de la provincia de Ávila.
Una de las actividades colaborativas de mayor éxito fue la que celebraron, entre colectivos civiles y empresas, con la plantación de árboles en el Paseo Fluvial de Arévalo. En la edición que se celebrará próximamente, las riberas de los ríos serán las protagonistas en una actividad que aglutinará a un buen número de personas.
Uno de los proyectos en los que han trabajado de forma activa, y satisfechos con el resultado, fue la colaboración con la propuesta inicial y actividades conjuntas con la Confederación Hidrográfica del Duero en la conversión del Molino de Don Álvaro de Luna en un espacio multifuncional para albergar un proyecto Life.
Uno de los objetivos de la asociación es promover campañas de sensibilización para que el rico patrimonio de Arévalo no desaparezca. En este sentido, tanto el Puente de Valladolid como la iglesia de Santiago del Colegio de los Jesuitas, que estuvieron incluidas en la Lista Roja de Patrimonio, salieron en el año 2021 de dicha lista gracias a las obras de rehabilitación por parte de las administraciones, actuaciones que se hicieron a instancias de las diversas campañas de sensibilización llevadas a cabo por La Alhóndiga.
Otra actividad cultural regular es el ciclo literario Verso Libre, con una actividad poética y literaria anual en la que se reúnen diversos poetas de Castilla y León en torno a una temática concreta. Cercana a la décima edición, se celebra en el histórico Teatro Castilla.
Dentro del patrimonio cultural, una de las principales sensibilidades de la asociación, se organizan en diversos momentos del año visitas acompañadas para que las personas que quieran conocer el rico patrimonio, la situación actual o la gestión puedan conocerlo de una forma cercana y didáctica. No obstante, sigue la espina clavada de la ermita de La Lugareja, BIC de propiedad privada en el que no se pueden realizar visitas, a pesar de lo que marca la normativa regional.
Otro de los proyectos en los que están trabajando es ‘De bodega en bodega’, para incentivar y promover la cultura del vino que existió en Arévalo, especialmente con la puesta en valor de la Bodega del Arriero o de Marolo Pelotas. El objetivo es poder utilizar este bello entorno junto al castillo para realizar actividades culturales y ampliar la visita turística a la ciudad.
Por último, la asociación pretende recuperar los personajes históricos de relevancia como fueron Juan Velázquez de Cuéllar, Contador Mayor de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, así como el Mancebo de Arévalo, morisco criptomusulmán arevalense, que escribió en el siglo XVI ‘La Tafsira’, posiblemente una de las primeras guías turísticas de España.
Arévalo es un claro ejemplo de la importancia de la aportación asociativa para ayudar a la administración pública a poner en valor la riqueza cultural, natural y patrimonial de la que dispone esta rica ciudad abulense.
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